Que no es necesario irse muy lejos para descubrir bellos rincones o lugares de gran interés turístico es algo con lo que estarás de acuerdo conmigo.
La propuesta que lance a Laura & David para realizar su reportaje Preboda y con la que estuvieron encantados, fue la de visitar Urueña.
Para el que no lo conozca, para el que no haya oído hablar de él, el pequeño pueblo vallisoletano de Urueña es, sobre todo, una sorpresa: un pueblo minúsculo (120 habitantes) encerrado en una imponente muralla, con unas vistas impresionantes sobre el campo castellano, diez librerías, dos museos, una galería de arte, una fundación (que es otro museo)… y mucho encanto
Esta pequeña villa de aspecto medieval conserva uno de los cascos urbanos mejor conservados de la provincia de Valladolid, una característica que hizo que en 1975 Urueña recibiese la declaración de Conjunto Histórico Artístico.
Laura y David lo tenían claro, amantes de los castillos y amantes de su tierra, demostraron esta pasión en cada toma que hicimos en su sesión preboda.
Su situación en uno de los bordes noroccidentales de los Montes Torozos, convierten a Urueña, por derecho propio, en un mirador natural de excepcionales vistas, alcanzando en días claros, tanto la Cordillera Cantábrica como los Montes de León con el Teleno como máximo exponente.
Si mirais al fondo podreis apreciar esta fascinante estampa y la verdad es que sin Laura y David el paisaje no sería lo mismo.
Declarada Villa del Libro, Urueña cuenta con más de diez librerías con encanto y un sinfín de actividades destinadas a los amantes de las letras y la cultura.
En líneas generales todo el pueblo es un continuo caserío de enorme belleza, que nos transporta a épocas pretéritas y que incita al paseo y al descubrimiento de cada uno de sus rincones.
Sobra decir que gracias a Laura y David otros rincones se volvieron mágicos al instante. Te dejo algunos...
The Show Must Go On!!